La elección se veía cerrada, pero Bogotá pedía un cambio, y lo fue de la forma impresionante, por un lado, por elegir por primera vez a una mujer como nueva alcaldesa, y por el otro, al preferir un mandato de la Alianza Verde, por encima de la vieja rencilla política entre Petro y Peñalosa en la ciudad.
Vendrán cuatro años difíciles, pero la nueva alcaldesa Claudia Nayibe López, era la persona con más estudios, y con el mensaje más transformador de la campaña, una mujer dedicada a la lucha contra la corrupción, alejada de los extremos políticos en la ciudad, y que hizo en los últimos años una carrera política contra todo cacique electoral.
López no la tuvo nada fácil, su votación es la más alta para su cargo en la historia del país, su principal contendor se quedó corto por poco más de 80 mil votos, pero también tuvo una votación a resaltar, y Carlos Fernando Galán, podrá elegir ser o no concejal de la ciudad.
El mensaje parece además una conclusión para una lucha electoral donde López y los verdes tuvieron en el pasado derrotas, y algunos desaciertos, con elecciones presidenciales donde se quedaron sin la segunda vuelta por un estrecho margen, y con una consulta anticorrupción que incluía varios puntos para reformar la forma de hacer política en el país, que igualmente se quemó en la puerta del horno por poco.
Así llega la oportunidad para la principal líder de un discurso de cambio, contra las maquinarias y contra la vieja política de líderes que dirigen partidos y movimientos donde ellos quieren tener la última palabra.
Ahora, a partir del 1 de enero de 2020, llega la oportunidad de la Alianza Verde, de López y sus aliados, de demostrar que ese discurso de cambio podrá con la polarización de la ciudad, y los grandes desafíos que le deparan. Una felicitación por su victoria por parte de Ola Política.